Hemos estado
alejados mucho tiempo ya,
Pero no el
suficiente, nunca habrá tal…
El tiempo no borrará
de mi corazón tu amor,
Ni de mi mente la
admiración que por ti siento…
Te pregunto
entonces: ¿es acaso el amor perecedero?
Aquellos que así lo
piensan, tienen la fortuna, o la desdicha quizá, De no haber amado jamás…
Porque mientras más
tiempo están alejados aquellos que se aman de verdad, ése, su verdadero amor, se
crece, más se tornan grises sus facciones y fríos sus latidos…
Me preguntas
entonces, ¿acaso el amor duele?..
A lo que yo
respondo: -Si, Amar…te duele…
Amarte duele cada
día más…
Duele porque no
estás…
Duele porque aunque no
lo quiera yo, si estuvieras aquí, te irías…
Duele pensarte todo
el día, aún a sabiendas, que ni mi nombre recuerdas, duele soñar con un futuro
a tu lado, sabiendo que de tu futuro mi rostro ha sido borrado…
Me pregunté
entonces: -¿Cómo ha de vivir un hombre en medio de tanto dolor?
A lo que mi alma
respondió: “El dolor de amar, es aquella alarma que nos dice a gritos…ESTÁS
VIVO…DISFRUTALO MIENTRAS DURE…”
Por ello estas
letras no son para ti…ni son para mí…son para mi dolor…mi vida se ha
manifestado ante mis ojos y el hecho de haber sufrido tanto por amor…me ha
hecho amarme más y amar con locura la vida misma…
Hoy mi dolor te da
las gracias, por hacerme caer en cuenta
de que vivo…y más aun por enseñarme que
sentir, amar, llorar, reír… en una sola palabra: VIRVIR; merece la pena!
No hay comentarios:
Publicar un comentario